lunes, 17 de mayo de 2010

La vida de mis ratones

Mi intención en este blog es ir contando el día a día de mis perritas... Lara, Kata y la "niña de Ponita", también llamada Rapid....

Para empezar describiré a cada una de ellas, y luego, ya veremos...

Kata es mi primera Ratona de Praga. Y digo mi primera (aunque tengo varías más) porque fue la primera que decidimos quedarnos cuando nació en mi casa, estando yo pendiente del parto. Fue la más pequeñita de los hermanos y desde que abrió los ojos, me enamoró. Es cariñosa, muy inteligente, muy independiente y la única que cuando estamos en el campo me sigue a mí y no a mí marido (él es el líder de nuestra manada). Su único defecto: los gases... no se entiende que un cuerpo tan pequeño (solo pesa 1,3 kilos) pueda producir semejante pestilencia...

Lara es 2 meses más joven que Kata. Nació en una camada bastante grande, 6 cachorros, y su madre decidió que no la quería porque era la más débil. Pero a nosotros nos parecía tan bonita, tan pequeñita que no íbamos a consentir que le pasara nada. Fueron 2 meses de biberones cada dos horas, de meterla en la cama con nosotros para que no pasara frío, de sacarle los moquitos porque estaba siempre resfriada y de curarle el ojito izquierdo, ya que siempre lo tenia lleno de legañas... Finalmente, salió para adelante y hoy está hecha toda una sinvergüenza, ya que se cree la jefa de todas, te gruñe en cuanto no le gusta lo que le estés haciendo y sale disparada en cuanto puede para intentar subirse a nuestra cama (cosa que nunca consigue ya que es demasiado bajita para poder llegar a ningún sitio). Pero es nuestra "perrita enfermera". En cuanto alguna de sus "amigas" tiene una pequeña herida, ella se dedica a curarla...

Rapid: es la mas joven de todas, tiene solo 3 meses y nació por cesárea. Su madre es nuestra perra adulta más querida. Siempre tuvo problemas para quedarse preñada, y de hecho su celo es muy irregular. Habíamos desistido en volver a montarla, pero un día encontramos un machito más pequeño que ella y muy bonito, y como le había venido el celo después de 1 año, decidimos hacer un último intento, ya que la mayor ilusión de Poni, era ser mamá. Nunca he visto una perra más contenta con su cachorra. En el tiempo que llevo en este mundo de los perros, he visto muchos partos y muchas mamás cuidando de sus cachorros, pero jamás a una como lo hacía mi Poni... Era incapaz de levantarse y acercarse al comedero que tenía a menos de 1 metro, con tal de que su niña no estuviera sola ni un segundo... Es una perra preciosa pero... no conocíamos a los padres de su papá y ha resultado ser más grande de lo que esperábamos.... Estamos seguros que será una estupenda mami cuando le llegue su momento, pero ahora su misión es correr, comerse todas nuestras zapatillas y tumbarse al sol el máximo tiempo posible...

Esta es la historia de las 3 ratonas cachorras que conviven conmigo en este momento. A partir de aquí, comenzaré a contar su día a día, sus trastadas y sus momentos más entrañables. Espero que alguien lo lea y les guste...